jueves, 13 de febrero de 2014

Puerto de Alcubierre - Ermita Villamayor

Poco a poco va tocando meterle caña al cuerpo, y hoy he aprovechado dia de fiesta en el tajo para darme una buena sesión, aunque acorde al nivel que llevo, que todavía estamos a primeros de año y no conviene pasarse. Ha sido otra de esas ocasiones en las que se comienzan las rutas sin saber muy bien hasta donde se va a llegar, ya que en principio iba a ir hasta Leciñena.

Salgo un poco antes de las 9 de casa, y me dirijo por la carretera de Peñaflor al cruce de Leciñena, donde giro a la izquierda. Hasta entonces todo llano, a partir del giro comienza a picar hacia arriba, alternando zonas de falsos llanos con alguna rampa aislada de hasta el 5%. Sin prisa pero sin pausa voy ganando altura, por zonas que tengo tan trilladas de años pasados que me conozco casi cada metro. Ahora viene curva a la derecha, descansillo y comenzamos a subir otra vez, curva a la izquierda, cartel comarcal de los Monegros... todo sigue en su sitio. Muy bien.

Al cabo de 13 km. coronamos el alto de Leciñena, aunque quizá sea demasiada denominación, al menos por este lado. Por el otro son 2km, el primero al 8% y el segundo en torno al 4%, que todavía podría llamarse así. En lo más alto, una edificación que más parece una ermita que una casa particular, aunque curiosamente no tiene ninguna cruz por ningún lado, sino veletas y adornos por el estilo. Sigo sin saber qué es exactamente.

Alto de Leciñena.

Bajo hacia el pueblo, y como me veo bien de piernas continúo hacia delante, hasta el km 29 de la carretera que viene de Perdiguera, y que marca el comienzo del puerto de Alcubierre. Cuando lo alcanzo, y notándome todavía fresco, sigo para arriba. Ya que estamos aquí...

El puerto pesa, la forma física no es la mejor todavía, y el último km se me hace largo. Tomo la decisión de estos casos, meter marchas suaves y despacito y buena letra. En los últimos 600 metros comienza a llover incluso, pero no caen gotas que avisen al principio y arrecia después poco a poco. Un segundo no llovía y al siguiente sí. Corono, hago la foto correspondiente todo lo rapido que puedo, y vuelvo para Leciñena rápidamente.


Comienzo el descenso y me pasa al contrario, pasados unos 600 metros, un segundo llovía y al siguiente no. Para de repente. Qué curiosas son estas lluvias esporádicas. Al entrar en Leciñena casi se adivinaba ya el sol. Hago la parada pertinente, y emprendo el camino de regreso por Perdiguera y Villamayor.

La vuelta la hago con sol, pero se levanta viento que me da de cara todo el camino, menos mal que no es muy fuerte, y suaviza conforme llego a Zaragoza.

Al pasar por Villamayor, veo otra vez la ermita a lo alto del pueblo, y me pongo a investigar cómo se sube allí, ya que he pasado infinidad de veces y nunca he subido. La investigación en sí dura poco, desde la carretera está indicado perfectamente:

La ermita desde la carretera, a la derecha. Al fondo, Villamayor
y los unifamiliares de Santa Isabel. A lo lejos, Zaragoza.

Desde la misma carretera se ve la calle que sube a la ermita.

La subida en sí no tiene ningún misterio, apenas son 300 metros hasta llegar arriba.

Santuario de nuestra señora del Pueyo.

Vista de Villamayor desde arriba. Zaragoza comienza donde 
se ven las zorreras del fondo (vaya asco de aire respiramos...)

Poco más hasta casa, donde llego a las 13:10. 82 km en total, en 3h 47min, para una media de 21,65 km/h. Bastante aprovechada la mañana.

Un saludo.
Adrian.

1 comentario: